MADRUGAR-TE

10361966_781083405312659_1390946413332187615_n

Se cree el sol que tiene suerte

porque sale por tus  piernas

y se pone por tu boca.

Y no sabe que suerte es lo que tengo yo,

que te veo el cuerpo atardecer

y no me voy cuando oscurece

 

AQUÍ DENTRO

10846013_750446528376347_889947829367500964_n

Hay gente que llama ‘despedida’ a cualquier desamor, a cualquier desengaño, a cualquier revés.  Pero nada más lejos de la realidad.

Porque una despedida es un trecho de abrazos no dados, de besos fusilados, de huesos no estrechados, de manos reprimidas, de noches que nunca se hacen de día.  Es un muro de contención. Un despegue forzoso. O una dictadura autoimpuesta. 

Todo lo demás, es un adiós.